Echesortu y Universidad eran los favoritos de cada serie, sin embargo Jockey goleó al primero por 11 a 6 y sacó una buena diferencia de cara a la revancha. El último campeón cayó en su cancha 2 a 1 frente a Regatas, pero no esta nada definido.
Vaticinar resultados o posibles finalistas en este deporte siempre es arriesgado, pero poco pensaban que los dos candidatos a estar en la final iban a tener que correr desde atrás en los partidos de vuelta.
El pasado jueves por la noche Jockey consiguió un resultado sorprendente para propios y extraños, luego de un primer tiempo parejo, en el que terminaron igualando 4 a 4, los comandados por José Gonzalo arrasaron con el Eche convirtiéndole 7 goles consecutivos.
En el final del encuentro el trámite volvió a emparejarse y el equipo del Topo Del Re logró al menos descontar dos tantos. Nuevamente hay que destacar otra gran actuación de Tacuara Etcheverri, quien convirtió cinco de los once goles para que los de Fisherton de a poco dejen de ser sorpresa para convertirse en realidad. Echesortu deberá mejorar mucho si quiere dar vuelta una serie que paso de tenerlo de candidato a de punto.
Ya en viernes por la noche nos esperaba el plato fuerte de las semifinales, Universidad y Regatas protagonizaron un duelo táctico que cuenta con varios capítulos. El encuentro fue parejo, a dientes apretados y con dos equipos bien concentrados en pos del objetivo.
La cuenta la abrió Sebastián Rico de tiro libre para el conjunto de la ribera e igualó antes del final del primer tiempo, el eterno goleador, Damián Faicht.
En la segunda parte se estudiaron sin sacarse diferencias, hasta que a minutos del final, Esteban Pérez le dio la victoria a los dirigidos por Juan José Capillo, quienes lograron sacar una pequeña diferencia, pero que lejos está de ser definitoria.
La mala noticia de la noche fue la lesión de Yiyo Pfirter, quien luego de chocar con Leandro Sardo sufrió la fractura de tibia y peroné. Más allá de la vehemencia con la que suele jugar Sardo, no hubo intenciones de generar tamaña lesión, de todas formas debió haberse ido expulsado por la patada, cosa que no ocurrió. Yiyo, inmediatamente fue hospitalizado y operado al día siguiente, para hoy haber sido dado de alta. Desde Rosario Fútbol le deseamos una pronta recuperación y esperamos poder disfrutar lo antes posible de su categoría dentro de un campo de juego.