Villa Gobernador Gálvez consiguió el ascenso en la Primera C, Copa Mariano Reyna, y se aseguró su participación en la segunda categoría de los torneos de fútbol masculino de la Asociación Rosarina de Fútbol el próximo año.

La campaña que realizó VGG en la tercera división de la ARF es para destacar. Gracias al colchón de puntos que acumuló a lo largo del torneo, selló la escalada divisional a falta de 4 fechas para la culminación del campeonato. Fueron 21 partidos ganados, 2 empatados y apenas uno perdido hasta la jornada pasada, cuando, tras conseguir la victoria por 2 a 1 frente a Jorgito Jrs., se quedó con uno de los dos boletos que entrega la C rumbo al Pinasco.

La fecha 26 desató la alegría total en el conjunto villagalvense. En dicha jornada, el primer equipo masculino de la institución, que era firme candidato al ascenso desde hacía varias semanas, se enfrentó a Jorgito, otro que peleaba (y pelea) en el lote de arriba. Sí Gálvez lograba quedarse con los tres puntos, no dependería de nadie para conquistar su objetivo principal. Y así fue, triunfó por la mínima y el club se vistió de fiesta.

“Estuvimos varios años en la puerta del ascenso y siempre nos quedábamos ahí. La C es una categoría muy difícil, los equipos son muy aguerridos. Nuestro principal objetivo era salir de esta división, donde hace mucho estábamos estancados. Esa era nuestra principal meta y la logramos”, narró, en diálogo con Rosario Fútbol, Oscar Mora, ex jugador y actual entrenador del primer equipo masculino de VGG.

El coach describió la satisfacción que toda la familia de Gálvez atraviesa en este momento, luego de varios años donde la suerte les fue esquiva: “Todo el barrio está muy contento, hace un montón la veníamos peleando. Hemos pasado por situaciones difíciles, en el último tiempo perdimos a directivos del club, veníamos de varios años golpeados. Esta alegría nos vino bien para apagar un poco esa mala racha que traíamos y ahora estamos todos esperando el campeonato”.

Mora se retiró de la práctica deportiva tras más de 20 años defendiendo los colores de Gálvez y asumió la conducción táctica esta temporada en la institución en la que pasó toda su vida futbolística. “Cuando colgué los botines y me propusieron asumir como D.T. acepté porque conocía a la mayoría de los jugadores, que con casi todos fuimos compañeros, y sabía que podíamos lograr algo importante”, destacó. Y no falló, el plantel no sólo obtuvo el ascenso, sino que ahora está a un paso de conseguir el título.

La jornada pasada, la número 27 del campeonato de Primera C, pudo haber sido de coronación para el elenco de la V. Se enfrentaron a Fisherton, su más inmediato perseguidor y uno de los que pelea por quedarse con el segundo ascenso. Si VGG ganaba, era campeón tres fechas antes. Finalmente, los dirigidos por Mora no pudieron quedarse con la victoria de visitante y ahora esperan campeonar de locales la próxima semana. Para el director técnico, el título es algo que, más tarde o más temprano, se va a conseguir: “La concentración no fue la misma (en el duelo vs. Fisherton). Después de haber logrado el ascenso la cabeza estaba en otra cosa. Todavía estábamos con los festejos y no tan enfocados en el partido. Pero seguramente, si no se da este finde que viene, se dará el otro”.

El club que ya tiene su estadía asegurada en la B la temporada que viene busca cerrar con broche de oro esta magnífica campaña. Le restan tres fechas y un triunfo en cualquiera de ellas les asegurará la estrella sin depender de nadie. Los rivales que se le vienen al flamante ascendido son Sportivo Silva, María Reina y Defensores de Funes, en ese orden. Mientras tanto, en Gálvez ya se disfruta de un fin de temporada a puro festejo, porque el objetivo máximo quedó cumplido.