El fútbol chileno se convirtió en un mercado interesante para los argentinos. Los futbolistas lo comenzaron a utilizar en gran escala y muchos entrenadores cruzaron la cordillera en el último tiempo. Así, podemos encontrarnos con muchos representantes nacionales y también de la Asociación Rosarina de Fútbol en él.

Es el caso de Dalcio Víctor Giovagnoli, que este domingo se consagró campeón de la primera división trasandina al mando del Club de Deportes Cobresal. El título no es uno más para el equipo minero, se trata del primero que consigue en sus 35 años de vida y lo logra superando a equipos históricos como Colo Colo y Universidad Católica. Es una caricia más al orgullo de la Asociación Rosarina que un nuevo integrante de esta gran comunidad de 110 años sea partícipe en otro logro en el plano internacional.

El conjunto de Atacama, al que arribó el DT junto a cuatro rosarinos más en 2014, se consagró a una fecha del final con un total parcial de 33 puntos, un número que no pasa para nada desapercibido en la Tercera Región (de donde son los mineros) ya que es la misma cantidad (33) de personas que hace cinco años mantuvo en vilo al mundo tras quedar atrapados en una mina.

Giovagnoli surgió de la escuela de Renato Cesarini (1996), y también dirigió en Central Córdoba (2000) y Tiro Federal (2007). Pero no es el único rosarino presente en el máximo logro de Cobresal en su historia. Junto a Dalcio se encuentran Martín Garnero como Ayudante de Campo, y Carlos Cóppola como preparador físico. El primero es otro nacido en Renato pero que tuvo paso por Tiro Federal. Además, es un ladero fiel de Giovagnoli ya que lo ha acompañado en otras experiencias como Rangers (Chile) y Sportivo Belgrano de San Francisco. Por su parte, Cóppola formó parte de Sagrado Corazón y de Morning Star antes de sumarse a este cuerpo técnico.

Sin embargo, en el plantel también figuran futbolistas surgidos de nuestra Liga. Se trata del defensor Federico Martorell, hijo de Carlos “Chiquito” Martorell, Síndico de la Asociación Rosarina de Fútbol, y ex defensor de Newell's (con quien alcanzó el profesionalismo), ADIUR y Tiro Federal; así como también el mediocampista Juan Pablo Miño, que defendió mucho tiempo los colores de Central Córdoba (donde llegó a Primera) pero que tuvo paso por otros equipos como Newell's, Central, Villa Gobernador Gálvez y Oriental. Además de ellos, otro argentino fue parte de este campeonato y se trata del volante santafesino Augusto Álvarez.

¡Desde Rosario Fútbol felicitamos a los campeones rosarinos y a todo Cobresal por esta anhelada y merecida estrella!