Robo y vandalismo

Los dirigentes, técnicos y jugadores de la Agrupación Infantil Arijón se llevaron una desagradable sorpresea este martes cuando concurrieron al club y descubrieron que un grupo de vándalos había ingresado a sus instalaciones y había sustraído maquinarias para el cuidado del predio, tales como una moladora, una bordeadora y una máquina de soldar. Además, se llevaron pelotas nuevas y un bolsón de medias, también de reciente adquisición.

No obstante, hubo más por lo que lamentarse. Los malvivientes provocaron destrozos antes de retirarse y hasta intenaron quemar los carnet de los futbolistas del club. El presidente de la entidad de barrio Saladillo, Carlos “Cilindro” López, expresó su malestar: “Han trabajado al oscuro, o con una linterna, porque cortaron el cable de la luz del frente. Se llevaron cosas que no solemos dejar, y que esta vez habíamos dejado. No sospechamos de nadie cercano, pero es raro... pudo haberles informado alguien con pasado en el club, o con cierto conocimiento. Tengo muchísima impotencia y bronca. La verdad que no sé qué hacer”.

Luego López agregó: “Dentro de esta desgracia hubo un gesto muy lindo que me emocionó. Hoy vino una señora del centro, jubilada, de alrededor de 80 años, porque nos había visto en televisión, en la nota que nos hizo Canal 3, y nos dio 50 pesos. No se los quise aceptar pero ella insistió. Dijo que si no se iba a ofender. Que quería ayudarnos porque sabía que éramos un club de barrio. Después se iba a volver en colectivo, pero un jugador del club la llevó con el auto. Cosas así te alegran el día” explicó, conmovido por el inesperado gesto anónimo.

Temporal y destrozos

La naturaleza parece haberse ensañado con San Telmo de Funes. El temporal del lunes a la noche voló el techo que cubre el depósito y los vestuarios visitantes en la cancha de 11 del rojiblanco. Las chapas de dicha edificación aparecieron tiradas a más de 30 metros del lugar (en las canchas de baby) rompiendo a su paso también el alambrado de las canchitas que están cruzando la calle. Además, el fuerte viento voló una gran cantidad de balones que se dispersaron por el barrio, alrededor de 50, y de los cuales se recuperaron la mayoría (estarían faltando 15 aproximadamente).

La presidenta del Club, Débora Edreira, se puso al frente de la búsqueda de los elementos perdidos. Esa misma noche, y con la lluvia a pleno empapándolos, Edreira concurrió a la cancha para buscar los elementos que estaban diseminándose por todos lados. Acompañada por allegados y gente del club (entre los cuales se encontraba Diego Scoppa) pudieron evitar que las consecuencias del desastre fueran peores.

“Nos vamos a recuperar de esta nueva desgracia. Porque no es la primera vez que la naturaleza perjudica a San Telmo. En diciembre pasado nos había volado el techo de los vestuarios del baby por lo cual hubo que hacerlos de nuevo. Ahora otra vez tenemos que arrancar con los arreglos. Por suerte este fin de semana no jugamos de local” señaló Edreira, que a la vez agradeció a un ex directivo del club que apenas advirtió lo que ocurría se comunicó telefónicamente con ella para que se hiciera presente en el lugar, e impidiera pérdidas mayores.

Nos solidarizamos

Desde Rosario Fútbol naturalmente repudiamos los actos de vandalismo, como el que sufrió esta vez Arijón, y que tan a menudo saben padecer otras instituciones. Asimismo, lamentamos los destrozos que el temporal y la naturaleza provocaron en otro de nuestros afiliados. Para ambos clubes la Asociación Rosarina de Fútbol se pone a disposición, y de seguro colaborará en lo que le sea posible para propiciar su recuperación.

Fotos: Facebook Carlos López y Débora Edreira.