La Selección Rosarina Sub17 fue merecidamente campeona del Torneo Nacional que organizó el Consejo Federal de AFA, y sus méritos no se reducen a un partido, un jugador, o un golpe de suerte. Todo el proceso fue seguido de cerca, y por supuesto apoyado, por la Mesa Directiva de la Asociación Rosarina de Fútbol. Todo lo humanamente posible se hizo desde lo dirigencial para respaldar al Cuerpo Técnico elegido, que por cierto, también realizó un trabajo serio y metódico, no sólo en la elección de jugadores, sino en el modo de manejarse con el plantel desde un primer momento.

Este Seleccionado jugó en total 14 partidos. Cinco correspondientes al Torneo Provincial, cuatro al paso intermedio (Chajarí y Canals), y otros cinco por el Torneo Nacional. De ellos ganó 11, empató 2 y perdió apenas uno, la revancha ante Chajarí, en la provincia de Entre Ríos, partido en el que le echaron dos jugadores en los primeros minutos del primer tiempo. En total, el rojiblanco marcó 42 goles y le hicieron sólo 6. Esta fue la progresión de sus resultados:

Torneo Provincial:
1-0 Liga Esperancina de Fútbol.
5-0 Liga Galvense de Fútbol.
0-0 Liga Sanlorencina de Fútbol.
8-0 Liga Ocampense de Fútbol.
4-1 Liga Departamental San Martín.
Instancias intermedias:
3-0 Liga de Chajarí (local).
0-1 Liga de Chajarí (visitante).
3-0 Liga de Canals (visitante).
4-0 Liga de Canals (local).
Torneo Nacional:
3-0 Liga Rionegrina de Fútbol.
4-2 Liga Salteña de Fútbol.
3-0 Liga de Fútbol de Bahía Blanca.
2-0 Liga Mercedina de Fútbol.
2-2 Liga de Fútbol de Bahía Blanca.

Además de los 19 que viajaron a San Juan hubo otros jugadores que formaron parte de este plantel y pusieron su granito de arena para que esto llegue a buen puerto. Franco Pedraza, Facundo Di Pietro, Ramiro Gómez Silva, Bruno Laure, Lázaro Bravo, Bruno Biancuchi, Alejandro Bernal, segundo marcador central que fue titular en todo el Torneo Provincial, y luego por una lesión debió ser reemplazado. También hubo varios profes acompañando a Pablo D'alessandro. Arrancó Adrián Busso, continuó “el topo” Gonzalo Marín, y culminó Juan José Orsini. En lo referido a los arqueros, el Entrenador que se ocupó de ellos fue siempre Sebastián Lucero, que trabaja en Newell's, y sigue atajando en la Liga Casildense de Fútbol.

Curiosamente, el único que jugó todos los minutos (450) de los cinco partidos en el Torneo Nacional, fue el último jugador en incorporarse: Marcos Martinich. Justamente quien reemplazó a Bernal. Gonzalo Gauna, de Coronel Aguirre, también tenía presencia ideal, pero en la final fue reemplazado promediando el segundo tiempo. El DT, Pablo D'alessandro, tuvo fundamentales participaciones en momentos donde los chicos perdían la brújula, y el entrenador estaba ahí para orientarlos, motivarlos, y corregirles los pequeños errores. En síntesis, fue un triunfo de todos. Una experiencia inmejorable, e inolvidable. Que se coronó con una vuelta olímpica en un Estadio fantástico y moderno, ante los ojos nada más y nada menos que del Seleccionador Nacional Sub17, Humberto Grondona hijo.

¡Salud campeones!