En ocasiones los que pierden se retiran tristes o preocupados del campo de juego. A veces, en el fútbol, los hinchas increpan a los jugadores que no pudieron regalarles una alegría. Les exigen más sacrificio. Más compromiso con la camiseta. En la final del Torneo Hermenegildo Ivancich 2012/13 disputada este jueves en el Estadio José Martín Olaeta, nada de esto ocurrió. Quien a la postre se marcharía perdidoso, Arijón, fue despedido con un aplauso cerrado de sus hinchas. Y lo merecido que lo tenían.

El conjunto que desde hace muchos años dirige técnicamente Carlos López, más conocido en el ambiente de Rosarina como “Cilindro”, desplegó un fútbol vistoso. Con espíritu de barrio. Con alma de potrero. Sus jugadores salieron al campo muy encendidos, dispuestos a demostrar todo lo mucho que saben. Y vaya si lo hicieron. Fueron largamente ganadores en el duelo por la posesión de la pelota, y aunque eso no necesariamente significa dominio, fueron encomiables sus esfuerzos para acercarse al gol, y claro está, a la victoria.

Pero lo más elogiable, lo que hizo que todos y cada uno de los subcampeones del Ivancich se retiraran del Estadio con la cabeza en alto y el pecho inflado de orgullo, fue el modo en el cual jugaron los 90 minutos. Siempre respetando un estilo. El cual, precisamente, respeta la pelota. La cuida. La pone al piso todo el tiempo. Obliga a sus jugadores a levantar la cabeza para encontrar un compañero. Tira paredes. Toca rápido. Prioriza lo colectivo a lo individual. Ese, evidentemente, es el fútbol que les inculcó su conductor, Carlos López, y el que mantuvieron a ultranza el jueves.

Como quien dice, “murieron con las botas puestas”. Cayeron derrotados, pero a su manera. Sin resignar jamás lo que ellos entienden por buen juego. Claro que ahí ya nos meteríamos en un debate interminable, respecto a si “jugar bien” es lo mismo que “jugar lindo”. Jugar inteligentemente también puede ser replegarse para atacar en el momento justo. O sacar provecho de una “segunda jugada”, esos rebotes que quedan luego de un pelotazo largo. Hay equipos con oficio, armados de atrás para adelante, y defender bien también forma parte del “jugar bien”. De modo que ese sería el único lunar de Arijón, el haberse descuidado en algún momento atrás.

Pero aún así, Arijón es un equipo que sabe a lo que juega. Y acertados o no, sus futbolistas no se mueven de ese libreto. El mismo que los llevó hasta esta instancia definitoria. Lo que www.rosariofutbol.com quiere es felicitar a Arijón, por mantenerse tan leal a sus convicciones. Quizás por eso fueron felicitados hasta por sus rivales. Raúl Belén y Fabián Belén no dudaron en saludar a López e instarlo a que siga en ese camino. Pero no fueron los únicos que se acercaron a un “Cilindro” ya por entonces emocionado. También los árbitros, los periodistas, y los directivos presentes, quisieron agradecerle a él y sus muchachos por el espectáculo brindado.

Esos mimos intangibles quizás no puedan colocarse en ninguna vitrina, pero quedarán en la memoria de cada uno de los jugadores de Arijón. Porque quien va por el buen camino siempre tendrá caídas. Lo importante es que no modifique su actitud ante el primer tropezón. Jugando así, seguramente serán muchas más las victorias que las derrotas en el futuro de esta humilde institución. Enhorabuena. Y como dicen en la arenga antes de salir a la cancha... "a jugar! a jugar! a jugar!"