La lluvia no paró al torneo Hermenegildo Ivancich y por la segunda fecha del Grupo 2, Tiro Federal visitó al CADU en barrio Cotar, en lo que a priori era uno de los encuentros claves para la futura clasificación, ya que ambos habían ganado en el debut y buscaban quedar como punteros en soledad en la zona A.

El Tigre no la pasó nada bien en el arranque, sin embargo con el correr de los minutos pudo imponer su superioridad y con poco, en un partido discreto en el que el mal estado del terreno de juego fue protagonista, terminó consiguiendo tres puntos fundamentales en un reducto siempre complicado.

Los primeros minutos fueron todos del local, teniendo la pelota y generando chances. Con Facundo Camafreita como el abanderado, los comandados por Carlos González tardaron 16 minutos en encontrar la apertura del marcador. El mismo enganche fue quien la inició con una linda pisada por la derecha y la tocó atrás para Miguel Heredia, quien de primera sacó un potente disparo. Bianchi pudo contener el primer remate, sin embargo el rebote cayó en los pies de Luciano Reynoso, quien dentro del área chica solo tuvo que empujarla para estampar el 1 a 0.

El resultado era justo, sin embargo con la ventaja a su favor, Defensores comenzó a bajar su nivel y a partir de ello el encuentro se hizo parejo. Igualmente la visita no lograba inquietar y daba toda la sensación que los locales tenían todo controlado, aunque en la última de la primera parte la cosa iba a cambiar.

Ya en tiempo cumplido Javier Olocco se metió al área por el costado izquierdo y con un remate cruzado y rasante colocó el esférico bien lejos del alcance de Medina, para poner todo como al principio. El marcador no estaba signado por la justicia, más allá que después del 1 a 0 el Rojo dejó de generar peligro.

En el complemento la cosa fue diferente y con ese envión que le dio el gol Tiro lo supo capitalizar. Luego de merodear el área algunas veces, a los 9 llegó el tanto para darlo vuelta. Largo pelotazo bien controlado por Brian Martínez, desborde por el costado derecho y cuando estaba pisando el borde diestro del área sacó un centro que se fue cerrando hasta meterse por detrás del cuerpo de Medina y transformarse en el 2 a 1.

Los buenos minutos del CADU en el arranque ya pertenecían al pasado y el equipo mostraba una cara completamente opuesta. De hecho, pasaron los minutos, se fue consumiendo el tiempo y el local casi no pudo generar situaciones de riesgo. El nerviosismo se apoderó de los jugadores y las imprecisiones se multiplicaron.

Solo una media vuelta de Ángel Chávez que se fue cerca y un débil disparo de Camafreita que controló sin problemas Bianchi fueron las principales chances que tuvieron los de la zona noroeste. En tato, los de Ludueña contaron con más de una decena de contras como para liquidar el pleito, sin embargo muchas no llegaron ni a transformarse en una situación de peligro por las malas decisiones de quienes las encabezaban.

Así fue que el tiempo se agotó y los dirigidos por Jorge López se adueñaron de tres puntos claves, en una cancha en la que no gana cualquiera, con un terreno que no favorecía su juego y ante el otro equipo que también había ganado en el inicio. Dos triunfos en dos partidos que hacen ilusionar al Tirolense, más allá que este Ivancich recién comienza.