Independientemente de lo que marca la tabla, Oriental es conocido como uno de los equipos que mejor juegan en la Rosarina. Con buen trato de pelota, salidas claras y ataques intensivos el equipo de zona sur llegaba hasta la cancha a Defensores Unidos a imponer su forma de afrontar los partidos.

Sin embargo, a los comandados por Ariel Impallari les costó hacer pie en los primeros minutos. Con algunos problemas defensivos, el local era el claro dominador de las acciones y el que más chances generaba. La más clara fue a los 5 minutos de juego cuando Cristian Ortega quedó mano a mano con el arquero entrando por izquierda, pero su remate se fue demasiado ancho.

La presión de Defensores surtía efecto y Oriental se veía obligado a tirar pelotazos y a desordenarse demasiado. Pero el encuentro de a poco se fue planchando y emparejando al mismo tiempo. Pasaba poco, y a los 33 llegó la acción que sacudió la tarde.

Milton Martínez tomó el balón a 10 metros del área grande volcado sobre el sector izquierdo tras un rebote, acomodó su cuerpo de una forma muy particular y sacó un tremendo bombazo de volea que se le metió por encima del cuerpo y pegada al palo zurdo del joven Franco Medina, quien solo atinó a mirar semejante obra de arte.

Con el resultado a su favor, el aurinegro comenzó a soltarse y su rival a entrar en la desesperación. Tuvo un par de contras sobre el final del primer tiempo, pero la falta de puntería no le permitió cerrar el encuentro antes.

Ya en el complemento el partido estaba planteado muy clarito, los de barrio La Cotar iban como podían y dejaban espacios en el fondo, mientras que la visita se replegaba para salir de contragolpe. Las imprecisiones empezaron a abundar, hubo poco juego asociado y en esa lucha intensa los arqueros pasaron a ser meros espectadores.

Oriental era de los dos el que más cerca estaba de modificar el tanteador, sin embargo tuvo que esperar demasiado para liquidar el partido. Sin embargo, pese a ese sufrimiento el segundo tanto llegó para que los minutos finales sirvan solamente como adorno del encuentro.

A los 40 Luciano Acosta y Milton Martínez hilvanaron una doble pared con una velocidad suprema para que el primero de estos quedara mano a mano con el arquero. Lejos de ponerse nervioso, el 5 se tomó el segundo necesario y definió de forma cruzada para poner el 2 a 0 con el que terminaría el encuentro.

Muy buena victoria del conjunto de zona sur que continúa escalando posiciones y pese a aun estar lejos de los primeros puestos sueña con seguir peleando. En tanto, el CADU deberá comenzar a ganar si no quiere sufrir en la zona baja, por ahora se encuentra aliviado, pero no debe regalar absolutamente nada.