Nunca un equipo de la Primera C se había quedado con la serie en una promoción contra la B Metropolitana. Pero este equipo copó la parada y se quedó con la serie para regresar tras dos temporadas a la tercera categoría del fútbol argentino.

Duro fue el encuentro en el Gabino Sosa, para luego viajar a Ezeiza con un panorama difícil, ya que por la ventaja deportiva el Azzurro con un empate se quedaba en la B Metro.

Al igual que en Rosario en el trámite del encuentro lo mejor lo mostraba el conjunto de Vaquero, fueron corriendo los minutos y pero no lograba vulnerar el arco rival. Lo mejor aparecía de la mano de Marcos Figueroa que en el mano a mano estaba imparable. Cuando eso se complementaba con la precisión de Nicolás De Bruno, el Charrúa estaba intratable.

Pero el primer tiempo terminaba sin goles, además de una expulsión para cada lado, Lucas Lazo, para la visita y Leonardo Gómez para el local. En el complemento se mantuvo la tendencia, el Matador manejaba los tiempos, la pelota y dominaba el trámite. Con paciencia fue trabajando el juego hasta que llegó el gol, a los 13 minutos de la segunda parte, le quedó la pelota a Figueroa dentro del área y no perdonó, infló la red para poner el 1 a 0.

El camino se abría cuando empezaba a aparecer más complicado. Así se despertó el local que abrió la cancha y arremetió contra el arco defendido por Juan Cruz Leguizamón, pero en defensa dejaba muchos espacios y la velocidad de Lescano era un arma letal.

Así fue como sobre el final una gran corrida del Tate, que eludió al arquero y en el borde del área definió con el arco vacío y con los ojos llenos de lágrimas grito su gol. Todos los jugadores fueron a abrazarlo y la emoción copó el estadio. Para algunos lágrimas de felicidad, para otros de tristeza.

De regreso a Rosario, el Charrúa está en la B Metro y logró ganar la última promoción que nadie había podido pasar.