La alegría estaba contenida, pasaron años, jugadores, cuerpos técnicos, torneo y Americana no lograba ser campeón. Siempre protagonista, pero nunca lograba dar la vuelta. Hasta que una noche se dio. El esfuerzo de tantos jugadores, dirigentes, hinchas y además dio sus frutos en este 2012. Americana ganó una nueva final, como lo había hecho un par de días atrás ante Regatas y desató la locura de su gente.

El encuentro arrancó por demás de favorable para los locales. A los 2 minutos solamente llegó la apertura del marcador, a través de un remate de Tomas Tavella que se desvió en algunas piernas y terminó descolocando a Teitelman. Pero a los 5 hubo más, y nuevamente a través de Tomy llegó el segundo. Perdida infantil de Damián Epstein, robo del zurdo y toque de cara interna para la locura de las más de 300 personas presentes.

USAR había comenzado dormido y la fiesta parecía estar completa, sin embargo los minutos empezaron a correr y el conjunto sionista comenzó a hacerse de la pelota, a generar algunas situaciones de riesgo y a manejar los tiempos, pese a que se encontraba en desventaja. Para colmo, a los 10 el CUA recibió un baldazo de agua fría, ya que en una jugada muy luchada, Damián Rozin cayó sin intención sobre el tobillo del Gato Pérez, obligándolo a dejar el campo de juego.

La visita fue, y de tanto ir tuvo la más clara a través de una sexta falta ejecutada por Kevin Garmizo, sin embargo, Ignacio Galacho achicó perfecto y comezó a demostrar porqué iba a ser una de las figuras de la noche. Los dirigidos por Mossuto se paraban de contra, y en una de ellas casi estiran la ventaja cuando el Látigo Suárez se escapó por izquierda y su remate reventó el travesaño.

Americana parecía tener todo controlado, sin embargo a los 3 minutos del segundo tiempo, apareció Kevin Garmizo para sacar un tremendo derechazo que se clavó en el ángulo superior derecho. Ahora el que había comenzado dormido era Unión, ya que al minuto Teitelman estrelló un remate en el palo que podría haber sido el empate.

Sin embargo, cuando las papas quemaban volvió a aparecer uno de los mejores jugadores del torneo. Tavella recibió de Pérez Mota, se sacó un hombre de encima, tocó para Kasevich y fue a buscar la pared, todo a extrema velocidad, para terminar definiendo con el arco vacío y poner las cosas 3 a 1. Pero como si fuera poco, a los 15, el Chule Pochettino movió un tiro libre hacia el medio y Tomy, en una noche inspiradísima, marcó entre las piernas del arquero para sacar ventaja máxima.

Todo era algarabía en la cancha de Brassey y Colombres, pero parece que si no es sufriendo no sirve para Unión Americana. Primero Alan Banker con un preciso remate cruzado puso el descuento y a nueve del final, Brian Garmizo, quien había reemplazado a Ezequiel Teitelman en el arco, hizo una tremenda jugada individual dejando dos hombres en el camino y clavándola arriba para el 4 a 3.

Para colmo, como para meterle más emoción, Sebastián Kasevich, quien había sido de los mejores de la cancha detrás de Tavella y Galacho, se erró tres chances increíbles debajo del arco como para liquidar el pleito. Pero el tiempo corrió, el rojiblanco se cerró bien atrás y con el pitido final se desató la locura.

Las épocas y rachas negativas quedaron atrás, el CUA se pudo sacar la mufa y festejar a lo grande un título que se le venía negando. Premio al esfuerzo, al sacrificio y a la dedicación de un grupo que no bajó los brazos y que realmente supo como sortera cada uno de los escollos que tuvo enfrente, dentro y fuera de la cancha.