Los viajes a Buenos Aires de diferentes clubes de nuestra ciudad se han hecho habituales en el último tiempo. Para la mayoría el gran objetivo de tales incursiones es “mostrar” jugadores que en un futuro no muy lejano puedan incorporarse a los diversos clubes del profesionalismo, y permitirle a las instituciones amateurs rosarinas tener un ingreso económico a partir de algún convenio, o bien por el derecho de formación de los futuros “cracks” del fútbol.

No está mal, es un recurso genuino. No obstante, en el caso de Tiro Suizo la finalidad inicial parece haber sido otra. Es que charlando con las personas responsables de haber organizado la visita al Club Atlético Banfield, supimos que lo que están buscando es “roce con los equipos que participan en los torneos de AFA”. Así nos lo manifestó Matías López, delegado del Tiro en Rosarina, y miembro de la Subcomisión de fútbol de la entidad de zona sur.

“Lo que queremos corroborar es que no estamos tan alejados con los clubes de Buenos Aires” explicó “el topo” López, y amplió “demostrarle a los chicos que los trabajos que se hacen en Tiro están a ese nivel, y de paso por supuesto, permitirle a nuestros jugadores que se muestren y que, si tienen un buen rendimiento, sean observados por técnicos y coordinadores de estos clubes importantes de AFA”.

Las tres categorías que viajaron fueron la 2002, la 2001 y la 2000, y “la que mejor partido hizo fue la 2000” se animó a confiar López. La posibilidad de este viaje surgió a partir del rosarino Edgardo Sbrissa, que actualmente se desempeña en el Departamento de Captación de Banfield, y en algún momento de su carrera como entrenador supo ser técnico de Pablo Narduzzi, actual DT de Tiro Suizo. Junto a Sbrissa también está Claudio Vivas, otro rosarino que permanentemente mira hacia nuestra ciudad para proveerse.

Hace poco más de un mes el tricolor estuvo viajando a otro destino del sur bonaerense: Lanús, donde realizaron una prueba similar. En Banfield gustaron varios jugadores, y en especial uno de la categoría 2000. “La idea es principalmente formativa y tiende a que nuestros jugadores ganen otro roce, y estén contentos, sabiendo que con estos viajes no sólo conocen y aprenden, también crecen como grupo” concluyó Matías López.

Fotos: Gentileza Alejandro Kamiñsky.