Por Miguel Martínez.

El tema “descenso” es un tema recurrente en las últimas semanas de cada año en Rosarina. Ya es habitual que se vivan fechas increíblemente intensas. Con más de tres o cuatro equipos involucrados en la pelea. Sucedió el año pasado cuando bajaron Pablo VI y Morning. Esa vez hubo, hasta la última fecha, cinco clubes con chances de caer en desgracia. Otra definición apasionante se dio en 2007, cuando en pleno Olaeta descendió Argentino, una tarde en la que también bajó 7 de Setiembre, y se salvó de milagro Mitre de Pérez. Pero en los últimos tres años se sumó también la lucha por el descenso a tercera división, categoría que se agregó en 2009. En 2010 bajaron Lavalle y Gálvez, y en 2009 Bancario y 7 de Setiembre.

Pero mejor metámonos en lo que puede ocurrir este domingo en la Copa Pinasco de Primera B. Porque son muchas las situaciones que se pueden dar. Botafogo tiene 16 puntos, El Torito 15, y San Roque también 15. De terminar así, obviamente los que descenderían serían El Torito y San Roque. Es decir, que si los tres obtienen resultados similares (tres victorias, 3 empates o 3 derrotas), el que se salva es Botafogo. Es más, es el único que depende sólo de sí mismo. Si le gana a Sarmiento seguirá el año que viene en la Primera B. Ese trascendental partido se jugará el domingo a las 16 horas (todos van al mismo horario) en la cancha de Semillero.

Ahora bien, si Botafogo empata y gana alguno de sus otros dos rivales (El Torito y/o San Roque) el equipo de Baigorria habrá descendido. En ese caso pueden pasar tres cosas: que sólo gane El Torito (sin importar si San Roque pierde o empata, da igual) se salvará el elenco de zona norte; que sólo gane San Roque (en ese caso no importa si Torito pierde o empata), se salvan los de zona sur; o que ganen ambos, y que deban jugar un desempate para ver quien pierde y acompaña a Botafogo.

La última de las opciones es que Botafogo pierda. Si alguno de los otros dos gana (El Torito o San Roque), pasará lo mismo que en el ítem anterior, se salvan directo. Pero si ambos empatan se puede producir un triple empate en 16 puntos. En tal caso habrá que disputar un triangular, todos contra todos, para saber quien salva el pellejo y quienes descienden. Ya hay un antecedente de triangulares. Fue en el año 2005 cuando Oriental perdió la categoría (cayó de la A a la B) tras ser el último del mini-torneo que protagonizó contra Tiro Suizo y, precisamente El Torito.

Si pasa que Botafogo pierde, El Torito pierde, y San Roque empata, se producirá un empate sólo entre dos equipos (en este caso entre el Bota y el Roque). Esto mismo puede suceder con el Toro como protagonista, si son ellos los que empatan, y el aurirrojo el que pierde. Como se ve, innumerable cantidad de posibilidades pueden darse, por lo que se prevé que estarán todos (técnicos, jugadores y directivos) intercomunicados para conocer resultados de otras canchas que puedan cambiar su suerte. Será una tarde emotiva, y seguramente inolvidable.

En el Torneo Molinas la pelea por no descender parece reservada para Juan XXIII y Tiro Suizo. Dos clubes que ya lucharon esta batalla en el 2008. En esa oportunidad le tocó descender a Juan XXIII y Tiro Suizo se salvó por 3 puntos, justamente la ventaja que le lleva hoy. Uno de los dos descensos, cabe aclarar, ya se definió: bajó Arijón, tras perder 4 a 1 ante Renato Cesarini. La segunda e indeseada plaza, intentan evitarla el rojo, que tiene 24 puntos, y el tiro, que suma 27. En el medio de ambos se encuentra Sagrado Corazón, pero el equipo del “mono” Santamaría no puede descender, ya que el año pasado ganó la Zona Permanencia, y obtuvo el derecho a quedarse al menos un año en el máximo torneo de la ARF.

En los cuatro partidos que tienen por delante, Tiro Suizo parece tener un fixture levemente favorable. Ahora visita a Central Córdoba en el Poli charrúa; luego recibe a Arijón, ya descendido; en la penúltima visita a Oriental, que pelea el título y necesita los puntos tan imperiosamente como ellos, sin dudas un clásico imperdible; y finalmente recibe a Griffa, que tampoco pelea por nada. Por el lado de Juan XXIII, arranca visitando a Unión en Álvarez; continúa recibiendo a Alianza Sport; visita luego a Tiro Federal en el nuevo predio que tiene el tirolense; y cierra recibiendo a Río Negro, otro salvado y tranquilo.

Está claro que todo puede pasar. Todavía la salvación está en sus manos. Dependerá de que jueguen bien, busquen el arco de enfrente sin mezquindades, y a la vez no descuiden el propio. En pocas palabras, deben conseguir lo que todos buscan en el fútbol. Regularidad, solidez atrás y efectividad adelante. Si lo logran permanecerán en el círculo de elite. Tiro Suizo, por cierto, es el equipo que menos goles convirtió (26), pero Juan XXIII no está tan alejado de esa cifra (28). Por el contrario donde sí se ve diferencia es en los goles en contra. Los papales recibieron 50, y después de Arijón son los más goleados, mientras que a Tiro Suizo le hicieron 39. Algo mejor.

Los dirigidos por Héctor De Marco llegan de dos empates consecutivos. Igualaron contra el puntero Central (un buen resultado) y contra Griffa de visitantes. Tiro Suizo hace dos partidos que no convierte. Igualó 0 a 0 con Río Negro en la fecha 25, y cuando el partido con Aguirre (de la fecha 26) corría el mismo destino, llegó un gol sobre la hora del rojiverde. Eso le permitió a Juan XXIII descontar un valioso punto. Antes, los tricolores de zona sur habían perdido 4 partidos de 5 jugados, y sólo le habían podido ganar a Sagrado Corazón.